Fenómeno extraño, si los hay, el tema de los escoceses, o highlanders, siempre da que hablar (y pensar). Muchas personas me preguntan ¿por qué existen tantos libros con protagonistas masculinos que viven en las Highlands? ¿Es la “pollerita” lo que los hace tan atractivos?
Una pregunta es un punto de partida y aquí estoy escribiendo estas palabras.
Mi espíritu de investigadora (que me acompaña no solo en la disciplina histórica, sino en todos los ámbitos de la vida) me indica que vaya al comienzo, a dilucidar los verdaderos inicios de las novelas románticas con protagonistas escoceses.
Pero de inmediato me encuentro con un problema. Soy bastante nueva en el género, los años de edición de mis libros claramente marcan la década del 90. No he leído a las precursoras del género, como Kathleen Woodwiss, por ejemplo. Conocí la novela romántica a partir de Julie Garwood, al mismo tiempo que conocí a sus highlanders. Mi primer libro romántico fue La novia rebelde, que alcanza y sobra para convertirte en una fanática del género. Luego leí La Boda, El premio, Lady Johanna, El rescate, y todo el resto de los escoceses de Garwood.
Existen muchas otras autoras que también se dedican a esta temática: Susan King, Karyn Monk, Karen Marie Moning, por solo nombrar a las que he leído hasta ahora y que, desde distintos puntos de vista se aproximan a un tema que siempre tiene fieles seguidoras.
Como pueden ver, son limitados y escasos mis conocimientos. La novela romántica lleva más de 30 años en el mundo literario. De manera que aquel recio, sobreprotector y buen mozo primer highlander debe estar allí perdido en alguno de los nutridos estantes de alguna apasionada lectora de novela romántica, esperando a ser descubierto. Por eso lanzo desde aquí una pregunta al cyberespacio:
¿QUIÉN FUE EL PRIMER HIGHLANDER?
Para más información sobre los escoceses en la novela romántica ver:
Universo Romance
Romance Escocés
Sitios web de las autoras mencionadas:
Karyn Monk
Susan King
Karen Marie Moning
Imagen tomada de la Wikipedia