
Todavía tengo la mantilla que llevo sobre la cabeza, pertenecía a mi abuela y ella la usaba para ir a la iglesia hace muchísimos años (aunque ahora tiene algunos agujeritos gracias a las polillas). El vestido también lo había hecho ella, mi abuela Rosa era costurera, y sirvió durante mucho tiempo para jugar a la "dama antigua", aunque creo recordar que había sido reciclado en un vestido de princesa para un acto de fin de año, también del jardín.

Un recuerdo hermoso de hace muchos años.